

Título | Iconografía marginal de finales del gótico: la capilla funeraria de la iglesia de San Miguel de Alcaraz |
Autor | José Sánchez Ferrer |
Fecha | 1999 |
Materia | Patrimonio artístico, arte religioso |
Formato | 171 p. 22 x 16 cm. |
Editor | Instituto de Estudios Albacetenses «Don Juan Manuel» |
I.S.B.N. | 84-95394-01-4 |
D.L. | AB. 442-1999 |


Introducción
La iglesia de San Miguel es un edificio que ha llegado a nuestra época bastante deteriorado. En 1980 se comenzó a restaurar, operación que había concluido pocos meses antes de la realización de este trabajo. Dicha restauración se desarrolló con gran lentitud y largos periodos de inactividad.
Hoy se nos presenta el interior con bastante desnudez ornamental ya que está desprovisto de retablos -con la excepción del que hay en el altar mayor- y elementos decorativos. Solamente el mencionado retablo del presbiterio -en cuya hornacina-transparente se halla la imagen del titular, una talla de gran calidad obra del escultor murciano Roque López-, la cancela, las puertas de la antigua sacristía, la inservible caja del órgano, las deterioradas pinturas de las pechinas, algunos cuadros e imágenes y el mobiliario imprescindible para cumplir su función parroquial, dan cierto ornato a este templo.
Está edificada en una ladera y sobre un sector de la muralla exterior de la población y formaría parte de las defensas como una iglesia-fortaleza típica de la época, función a la que deben corresponder las saeteras que aún se conservan y, seguramente, la torre. Para compensar la inclinación del terreno y reducir el desmonte de tierra se levantó el pavimento sobre el nivel de la actual calle Mayor un par de metros, lo que hizo necesaria la construcción de una escalera de doce gradas para poder acceder a la portada.
La iglesia es de planta rectangular con casi 33 metros de longitud y más de 22 de anchura, pero con el ángulo izquierdo a los pies ocupado por un edificio particular adyacente. La fábrica se estructura en cruz latina que queda señalada fundamentalmente por la mayor altura de la nave central, nave del crucero y presbiterio.
El templo tiene tres naves; más alta y ancha la central, con dos tramos cubiertos con bóvedas de cañón con lunetos; las laterales, también bastante anchas, se cubren con bóvedas de aristas; la nave del crucero, señalada en planta únicamente por su mayor anchura, tiene cúpula semiesférica ciega en el crucero y bóvedas de cañón con lunetos en los brazos. La cabecera es plana, está constituida por tres espacios y puede considerarse estructuralmente como otro tramo; el presbiterio ocupa el espacio que corresponde a la nave central, es de planta rectangular, se cubre con bóveda de cañón con lunetos y se accede a él a través de gradas; el espacio que corresponde a la nave del lado del evangelio está cerrado para albergar la plataforma del fuelle, la escalera de subida al coro y otros elementos relacionados con el órgano que se colocó sobre un balconaje volado sobre el presbiterio; en la zona correspondiente a la nave de la epístola se ubicó la sacristía -hoy convertida en aseos debido a que la intención es destinar el inmueble a una función diferente a la eclesial-.
La distribución de los pies es semejante, aunque la capilla del baptisterio -cubierta por incompleta bóveda de crucería gótica-, al estar situada en la parte izquierda, según se entra, es muy reducida debido a la pérdida de solar que sufre por la ubicación de la casa anteriormente mencionada; el único acceso al templo se realiza por el centro, al término de una escalinata exterior, y el espacio de entrada es rectangular conformado y cubierto como un tramo más de la nave central, aunque más reducido que los otros; finalmente, en el lado derecho se halla la hermosa capilla gótica del Rosario o de San Antón, objeto de este estudio.
Adosada al primer tramo de la nave de la epístola, pero con acceso independiente al exterior, se levanta una pequeña torre prismática de aspecto macizo -probablemente medieval- con idéntica sección cuadrangular a lo largo de todo su desarrollo. La obra está construida con sillares en los ángulos y sillarejo en los frentes; el alzado se presenta en tres cuerpos separados por impostas, estando el superior constituido por cuatro vanos -uno en cada frente- con arcos de medio punto en los que se situaron las campanas; el remate del campanario es un simple tejado piramidal a cuatro aguas. A fecha de realización de esta obra la torre registraba resquebrajaduras de tal magnitud que fue necesario su apuntalamiento a través de una estructura metálica para evitar que se derrumbara. En el año 2006 se aprobó la restauración de la Torre de San Miguel.
La capilla del Rosario o de San Antón es de reducida superficie (6’25 por 5 metros), tiene considerable altura y posee un conjunto escultórico con interés iconográfico. Ocupa el ángulo suroeste del templo, es de planta rectangular y se cubre con bella bóveda de terceletes cuyos nervios apoyan sobre ménsulas situadas en los rincones y unidas por impostas o cornisas molduradas. Se accede a la capilla a través de amplia portada plana al exterior y abocinada interiormente, con numerosas pero poco profundas arquivoltas, abierta por su lado este, que la comunica con los pies de la nave lateral del lado de la epístola.
Entradas relacionadas
La torre de San Miguel se cae. Diario «La Verdad», 29 de abril de 2000. (En 2006 se aprobó su restauración).